Gloria Trevi ya no es aquella joven que vendía la imagen de irreverente, capaz de intentar acercarse a un espectador para con un conjunto de mujeres poderlo desnudar. Sin embargo la originalidad y talento de Gloria, no se ha perdido, ni con los escándalos, ni con sus desagradables compañías, ni con las acusaciones graves en su contra, ni por el hecho de ser mamá, ni con el paso del tiempo. Trevi sigue siendo un espectáculo musical sensual y una propuesta en la que el público sí cree, ya que Gloria a diferencia de otras propuestas contemporáneas y que resultan grotescas, conserva la magia explosiva que le permite abrir puertas exitosas que no parecen cerrarse ante su calidad de estrella.Más en www.somoselespectador.blogspot.com