sábado, 1 de marzo de 2025

AL TOCAR LA PUERTA






















La falta de metas propias que nacen de una reflexión moral confunden al individuo para adoptar metas sugeridas o copiadas, lo que causa el efecto conductual de la envidia, la baja autoestima, el materialismo, el aspiracionismo, la insatisfacción personal y la fácil adopción de direccionismos que se  promueven desde  los medios masivos de comunicación, así como  las falsas causas sociales y las modas. Un espectador con ideas propias y cauto de la información proporcionada,  resulta -un cerebro con ojos-, capaz de opinar a contra sentido de la masa y sin la pérdida de control razonal que produce el contagio emocional, y así, destacando su originalidad, creatividad y abandono de prejuicios y perjuicios, que son las características mismas del espectador inteligente lo que atenta contra el dominio de la manipulación mediática, que teje todo un sistema de dominio grupal. Sistema que para  ser derrocado, no necesita  un antisistema , aunque existe la teoría  de que entrando en esas profundidades, se corre el riesgo  de fortalecer aquello  que quiere atacarse  o caer  en la trampa  materialista o aquella del ego. Más en www.somoselespectador.blogspot.com